de San Roque
La rejoneadora Leo Vicens y los diestros Manuel Escribano y David Galván, ofrecieron con los toros de Soto de la Fuente y Fuente Ymbro una espectacular tarde de toros en la Feria Real de San Roque, organizada por Velagua Eventos.
Once orejas, un rabo, un toro indultado y muy buen toreo pudieron ver la más de media plaza que ocupó asientos en la calurosa tarde de ayer.
La corrida, que estuvo presidida por José González Maillo, comenzó con un minuto de silencio en recuerdo del empresario local Antonio Barberán, fallecido en la madrugada de ayer.
El Ayuntamiento de San Roque solicitó un minuto de silencio para recordar a "Antonio Barberán, empresario sanroqueño y activo colaborador con múltiples colectivos sociales. Colaboró durante su vida con un gran número de actividades, actos y distintos colectivos como el Club Deportivo San Roque o la Asociación Artística Familiar, también colaboró con numerosos colectivos sociales, a los que hay que sumar su estrecha vinculación con la Romería de San Roque o la Feria Real".
El alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix, acompañado de la edil de Bienestar Social, Eva Gil, y la teniente de alcalde de Cultura, Ana Ruiz, saludaron a los cada uno de los 400 mayores a los que el Ayuntamiento ha subvencionado en un 75% las entradas para presenciar esta corrida desde la parte alta de la histórica plaza sanroqueña, construida en 1854.
Otros ediles asistieron a la corrida de toros, así como la mayoría de la Corte Juvenil de la Feria Real.
La rejoneadora Lea Vicens logró en su primer toro una oreja, concedida por el respetable. En su segundo toro, también de la ganadería de Soto de la Fuente, logró 2 orejas.
En ambos, con unos corceles perfectamente adiestrados, dio un magnífico espectáculo de rejoneo, pero los astados no acompañaron a un mayor lucimiento.
Con los toros de Fuente Ymbro cambió el panorama. En su primero Manuel Escribano cuajó una buena faena y aunque el toro no fue al caballo con intensidad, con el capote y la muleta propició el espectáculo, con interminables tandas de muleta, por lo que el público pidió insistentemente el indulto del astado, que fue concedido, otogándose al diestro, que también puso las banderillas, 2 orejas y rabo.
En el segundo, con un toro con fijeza en el capote que sin embargo no fue mal al caballo, Escribano puso tres espectaculares pares de banderillas, brindó el toro a Ruiz Miguel, y cuajó una buena faena de muleta hasta que el toro quiso o pudo, con la que logró dos orejas.
David Galván le puso ganas en su primero, más flojo que su antecedor, pero la faena con el capote le hizo lograr 2 orejas, premio justo por su voluntad.
En el segundo, que estuvo a punto de derribar al picador, Galván cuajó una muy seria tanda de pases con el capote, con un repertorio de menos a más, arrancando los sinceros aplausos del público. Pidió el diestro torear sin música la última parte de la faena, arrancando los oles del respetable hasta la estocada final. Dos nuevas orejas premiaron su tesón y su arte en San Roque.