de San Roque
La Delegación de Seguridad Ciudadana ha intensificado la presencia de efectivos de la Policía Local en las playas del municipio, para realizar tareas de vigilancia y hacer cumplir la normativa para evitar contagios de Covid-19. Ante la suspensión de las ferias y otras actividades habituales en verano debido a la pandemia, desde el Equipo de Gobierno se ha decidido que los servicios extraordinarios de los agentes pactados para 2020 se realicen prioritariamente en las playas.
Así lo ha explicado el alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix. “Los representantes de la plantilla de la Policía Local -indicó- y el Equipo de Gobierno habíamos acordado un total de 720 horas de servicios extraordinarios para 2020, de manera que los actos del verano, en especial las ferias, tuvieran la cobertura de seguridad que se requiere. Ante la suspensión de estas actividades por la covid, hemos decidido trasladar esos servicios a las playas, que es donde se dan en la actualidad las mayores aglomeraciones de personas”.
“Desde el Ayuntamiento -añadió el primer edil- se está haciendo un importante esfuerzo por conjugar el disfrute de nuestras playas con la necesidad de evitar contagios. De hecho, la inversión total en materia de playas supera este año el millón y medio de euros, ya que se han intensificado servicios habituales cada año, como los de limpieza y salvamento, además de que se han puesto en marcha otros nuevos, como la megafonía, la información sobre el estado de las playas a través de Internet o las imágenes en directo, que vamos a poner en marcha en breve. Sin olvidarnos de que todo ello ha requerido un plan de contingencia previo, que también conlleva un coste económico”.
“Espero -dijo Ruiz Boix- que con la mayor presencia policial en nuestras playas nos sea más fácil hacer cumplir la normativa autonómica para evitar contagios, que reconozco que es difícil llevar a la práctica. Pido a la población en general que use el sentido común y evite situaciones de riesgo, para que nuestros agentes no se vean obligados a actuar y, en su caso, a recurrir a las sanciones”.
Por su parte, el teniente de alcalde delegado de Seguridad Ciudadana, Juan Manuel Ordóñez, ha señalado que “la pandemia nos ha hecho replantearnos nuestras prioridades y reorganizar el trabajo de la Policía Local. Existe una clara preocupación por evitar que las playas se conviertan en focos de contagio, así que se han tenido que tomar una serie de medidas como la limitación del aforo, la distancia entre los grupos de personas, la limitación de los accesos a las playas, el uso obligatorio de mascarillas en determinados espacios...”.
“Para hacer cumplir estar normas -añadió- se hace necesaria una mayor presencia policial, que se está desplegando tanto para cerrar los accesos a las zonas de aparcamiento cuando se detecte que se va a desbordar el aforo establecido, como también para ordenar el tráfico en esos y otros casos. También se pueden ver nuestros policías por los paseos marítimos y en la misma arena, para intervenir en los momentos que sea necesario, que espero que sean muy pocos”.
Ordóñez recalcó que “esta presencia policial no tiene afán sancionador, sino simplemente es necesaria para velar por la seguridad de todos, ya que no se nos pueden olvidar los meses de confinamiento, el sufrimiento de tantas personas y el daño a la economía. Estoy seguro de que la inmensa mayoría de los usuarios de nuestras playas asumen que esas medidas no son un capricho, sino que tienen detrás razones sanitarias de peso. En cuanto a los que no quieran asumir esta realidad, ahí estarán nuestros agentes para instarles a cambiar de actitud”, concluyó el edil.