de San Roque
Un buen número de niños y niñas ha participado hoy, domingo, en las actividades de "Limpita: la playa más bonita", que han tenido lugar en la playa de Torreguadiaro. Se trataba de la última de las jornadas de esta campaña promovida por la Delegación Municipal de Medio Ambiente, que dirige José Antonio Rojas.
La concejal de Educación, Belén Jiménez, asistió a las actividades de la mañana, y subrayó la importancia de concienciar a los más pequeños de la importancia de cuidar el medio ambiente, porque luego transmiten estos valores a sus familiares. También destacó la buena acogida de la campaña, que finaliza hoy, tras haber visitado también las playas de Guadarranque y Puente Mayorga/Campamento.
La actividad está dirigida a niños, a los que se les ofrece cuentacuentos; una gynkana con recogida selectiva de basura por la orilla de la playa; identificación de los diferentes tipos de residuos, y clasificación por contenedores; y juegos relacionados con el reciclaje de conocimiento, comunicación, cooperación, distensión y resolución de conflictos.
La campaña se inició el 17 de julio en la playa de Torreguadiaro, el 31 de julio en Guadarranque, el 7 de agosto en las playas de Puente Mayorga/Campamento, para finalizar hoy de nuevo en Torreguadiaro. Se ha llevado a cabo en dos sesiones, con horarios de mañana y tarde.
La iniciativa tiene como objetivos generales explicar a todos los participantes la vida de cada tipo de residuo y el daño que causa al medio ambiente; infundir en los participantes el hábito de reciclar y respetar el medioambiente; aprender y aplicar el concepto de las tres “R”: Reciclar, Reducir y Reutilizar; y conocer cada tipo de envase
Entre los objetivos específicos se encuentra demostrar que podemos tener juegos, juguetes y objetos prácticos sin gastar dinero; fomentar la capacidad creativa; impulsar el reciclaje; o despertar la imaginación y la originalidad.
También se quiere innovar para hacer más atractivos nuestros momentos de ocio con los amigos; reciclar gran cantidad de materiales que se consideran sólo basura; y fomentar el respeto por el medio ambiente.
Se pretende igualmente concienciar de que debemos producir menos basura a diario; promover entre los participantes la necesidad de reducir el consumo de materiales contaminantes; e impulsar a la utilización de los diferentes contenedores según sus colores y que residuos se depositan en cada uno de ellos.
Cuando los niños participantes, que deben llevar una gorra para protegerlos del sol y la pulsera para identificar a los diferentes grupos, se van registrando en orden de llegada, se les da una charla de manera divertida para explicar las ventajas de las tres “R”.
Cada grupo se une a un monitor, quien se encarga de entregarles los guantes y nombra a un jefe de equipo, que es el encargado de llevar la bolsa de basura y supervisar que se recoja todo residuo encontrado a su paso.
Se vuelve al campamento base y de manera escalonada cada grupo con su jefe de equipo y su monitor clasificará y depositará la basura recogida en cada contenedor correspondiente. Después se celebran la gynkana, dinámicas, talleres y juegos.