La Red de Bibliotecas y Bienestar Social se unen para ayudar a los padres a educar a sus hijos

El teniente de alcalde delegado de Bibliotecas, Manuel Melero, ha señalado que “la función de educar es una de las responsabilidades más complejas que un ser humano puede asumir. Por eso, consideramos que cualquier ayuda para los padres es poca, y desde Bibliotecas estamos muy contentos de que este material que ponemos a disposición de los usuarios de las escuelas de familia haya tenido tan buena aceptación”. Por su parte, la concejal delegada de Bienestar Social, Ana María Rojas, ha indicado que “las Escuelas de Familia están más que asentadas en San Roque, y cada año formamos a padres, madres y tutores en la educación de los niños y adolescentes. Este material didáctico que proporciona la Red de Bibliotecas es un complemento ideal para que los padres puedan profundizar en casa en el contenido de las explicaciones que reciben en clase, y despejar así las grandes dudas que suelen surgirles”. Para cubrir los temas que más interesan a los padres (cómo hablar de sexualidad o drogas con los hijos, cómo desarrollar una adecuada autoestima, cómo crear hábitos de estudio…), se ha realizado un listado de la bibliografía sobre dichos temas disponibles y se han solicitado los títulos de mayor interés. Gracias a esta iniciativa, tanto hijos como padres puedan acudir a un estand específico creado para este fin. Algunos de los títulos a los que ya se pueden acceder son: “¿Hablas de sexo con tu hijo?”, “Pregúntale a Supernany”, “¡A jugar!: actividades para enseñar buenos hábitos a los niños”, “Los hijos tiranos: el Síndrome del Emperador”, “Cómo estudiar con éxito”, “La recuperación de la autoridad”,... A finales de noviembre se pusieron en marcha con el patrocinio de Cepsa las Escuelas de Familia para el presente curso. Esta actividad viene funcionando desde 2001 y se enmarca en el programa de Ciudades contra las Drogas, con lo que la Escuelas de Familia logran un doble objetivo: educar y prevenir. Las escuelas se dividen por edades entre padres con niños o adolescentes, y en las mismas se abordan asuntos como resolución de conflictos, comunicación con nuestros hijos, expresión corporal, y las expectativas hacia los hijos. Se imparten un máximo de dos horas semanales. Además, en cada Escuela de Familia se tratan cuestiones personales con los padres, para abordar situaciones concretas que les preocupen.