de San Roque
Con la llegada del buen tiempo, y por segundo año consecutivo, en la Estación de San Roque se pone en marcha una experiencia: “Caminacole”, o cómo fomentar que los niños vayan andando al colegio, una iniciativa de la Asociación de Padres, la Asociación de Vecinos, el Colegio San Bernardo y el Ayuntamiento a través de las delegaciones de Educación y Seguridad Ciudadana.
El tte de alcalde de la zona y de Seguridad Ciudadana, Juan Manuel Ordoñez, ha mantenido una reunión con los representantes del AMPA y de la Asociación de Vecinos al objeto de coordinar las acciones para poner en marcha este año este proyecto, que tan buenos resultados diera el pasado año.
El objetivo es promover que los alumnos y sus familiares no lleguen al colegio por las mañanas en vehículos de motor. Para ello se incentiva a los niños con unos pasaportes o cartillas que cada mañana, miembros de Protección Civil sellan en el trayecto a pie en seis puntos de control distribuídos en la barriada.
Los participantes que consigan rellenar la cartilla completa de “Caminacole” participarán en un sorteo y se obsequiará con un diploma a todos los alumnos que hayan conseguido rellenar la cartilla en su totalidad.
Con esta iniciativa se pretende una reducción del tráfico en zonas cercanas al centro de la barriada; la reducción de la contaminación; y la mejora de las condiciones de vida de la barriada.
Para los niños, las ventajas son evidentes: incrementan su actividad física; desarrollan relaciones y conversaciones entre todos; amplían su círculo de amistades con participantes de otros cursos; aprenden a ser peatones; conocen mejor la barriada y a sus habitantes; y demuestran una mayor concentración en clase.
El tte de alcalde de Seguridad, Juan Manuel Ordóñez, ha señalado que “inculcamos en los escolares valores como el cuidado del medio ambiente y el ejercicio, por lo que desde la delegación que presido se colabora con miembros de Protección civil que sellan los pasaportes de los niños que van andando”.
La concejal de Educación, Mercedes Sánchez, apuntó que “nos parece una fantástica idea, por los valores que se quieren transmitir a los niños y sus padres, y esperemos que esta magnífica idea se pueda exportar a otros colegio del municipio”.
Las quejas de los vecinos cercanos al colegio por la aglomeración de vehículos hizo pensar al AMPA en fórmulas para satisfacer estas demandas y que además supusieran un atractivo para los niños y los familiares.