Visita a la obra del antiguo Pósito, que está previsto que termine antes de final de año

Ana Ruiz explicó que las obras se encuentran muy avanzadas, por lo que en los próximos meses podrá comenzar la adaptación de las instalaciones a uso cultural. La concejal se mostró muy satisfecha del aspecto del edificio, uno de los más antiguos del término municipal.

Las obras de la tercera y última fase del proyecto de adaptación del antiguo almacén de granos Pósito comenzó el 22 de abril. La empresa constructora es Serrano Aznar Obras Públicas, S.L., y tiene un presupuesto de adjudicación de 217.488,34 euros, IVA incluido.

En 2015 se realizó una fase preliminar que consistió en dejar el interior diáfano (derribo de los tabiques que fueron añadidos al edificio cuando dejó de almacenar grano), unos trabajos que se hicieron con personal municipal.

La primera fase de las obras se inició en abril de 2016 con un presupuesto superior a los 100 mil euros, consignados en el Presupuesto de 2015. Tenía como objetivos principales la consolidación de los muros de carga y la reparación de la cubierta. Se trataba de arreglar y reponer las viguetas de madera y las alfajías, así como el levantado del ladrillo por tablas. Finalmente, se trabajó en el aislamiento, impermeabilización e instalación de tejas.

En el Presupuesto de 2016 se incluyeron las otras dos fases, para lo que se consignaron 450.000 euros, si bien finalmente el coste ascendió a 350.000. Se trata de la consolidación de las columnas, la distribución interior, el montaje de las instalaciones eléctrica, de saneamiento y sanitarias, así como trabajos de carpintería, revestimientos de pared y suelo.

El antiguo Pósito se encuentra en la esquina entre las calles Francisco Tubino y Siglo XX, en pleno San Roque Casco. Es un edificio construido en 1730, de planta rectangular que servía de almacén de grano, si bien ha tenido otros usos a lo largo del tiempo. Inicialmente era el granero de San Roque, que fue asaltado por los franceses en la Guerra de la Independencia. Solían darse los bailes de Carnaval en el siglo XIX y parte del XX. Sirvió de alojamiento provisional de tropas y fue hospital durante la Guerra de África (1859-60).

Tras la Guerra Civil se empleó como centro de detención, y más recientemente fue una de las ubicaciones de la conocida emisora de radio dirigida por Francisco Jiménez "Radio Campaña de Navidad", que contaba con un pequeño escenario para las actuaciones en directo con objeto de recaudar fondos para las familias más necesitadas del municipio.

A principios de los años 80 del siglo pasado fue Jefatura de la Policía Local, y una parte se hallaba habilitada para el servicio de Vigilancia Aduanera. Finalmente se destinó a las oficinas de la empresa comarcal Arcgisa.