Un grupo de mayores disfruta de la Procesión Magna desde los balcones del Palacio de los Gobernadores

La organización corre cargo de las delegaciones de Participación Ciudadana, Multimedia, y Cultura, que ostentan los ediles Rocío Fernández, Fernando Vega y Ana Ruiz respectivamente. Para participar en esta experiencia, se informó a los distintos colectivos de mayores para que sus asociados solicitaran las pertinentes invitaciones. Hay que recordar que se ha habilitado un espacio especial para personas con movilidad reducida en la Plaza de Andalucía.

El alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, saludó a los mayores del Palacio, y luego se desplazó al atrio de la Parroquia Santa María La Coronada junto a la teniente de alcalde de Tradiciones, María Collado, para atender a las cámaras de Canal San Roque Radiotelevisión Municipal, al igual que hizo el presidente del Consejo Local de Hermandades y Cofradías, José Luis Perales.

Respecto a la atención a los mayores del municipio en el Palacio de los Gobernadores, el primer edil señaló que desde que accedió a la Alcaldía, hace 13 años, se mantiene esta tradición, y recordó que para disfrutarla sólo hay que tener más de 65 años e inscribirse en la Delegación de Participación Ciudadana.

En cuanto al recorte del itinerario y de los cortejos de la Magna, indicó que se trata de “una decisión difícil” que ha tomado el Consejo Local, aprovechando “la ventana sin lluvia” prevista entre las 17.00 y las 23.00 horas. Recordó que “diez imágenes saldrán del atrio”, mientras que el Medinaceli y la Merced lo han hecho a las 17.00 horas de la capilla de Los Olivillos, y Nazareno y Dolores de la Capilla de la Visitación a las 19.00. “Hay que preservar el patrimonio -apuntó el alcalde- y no es lo mismo salir a la calle con dos imágenes que con 14”.

En sus declaraciones, José Luis Perales indicó que “hace una semana que se aprobó el protocolo por lluvias en la Magna, pero no se preveía tenerlo que aplicar tan pronto”. Explicó que los cortejos irán sin nazarenos ni penitentes, tan sólo con los acólitos con el incienso, los oficiales y los representantes de cada hermandad. De esta manera se busca “ganar espacio para acortar la procesión”, para intentar estar en la parroquia a las 23.00 horas, cuando se prevé el inicio de las lluvias. Reconoció el presidente del Consejo Local que “no será una Magna con tanto esplendor como otros años, pero sí se mantendrá la esencia, lo principal, que son las imágenes”.

Considera que “está siendo una Semana Santa muy difícil” por las lluvias, lo que genera “frustración”, pero sostuvo que “hay muchos años por delante. Hoy vamos a intentar paladear, si el tiempo lo permite, este Viernes Santo”.

Por su parte, María del Mar Collado, como teniente de alcalde de Tradiciones, señaló que “esperamos que podamos disfrutar este Viernes Santo tanto de la Magna como de la procesión de Guadiaro (del Santo Entierro). En cuanto a la activación del protocolo por lluvia, señaló que “era lo máximo que se podía hacer sin suspender la Magna”, y dijo que “hay que respetar esta decisión difícil”.

Tras agradecer “a todas las hermandades de todo el municipio y a todos los cofrades” su esfuerzo en esta Semana Santa, Collado apuntó que la está viviendo “con momentos de mucha satisfacción y también con tristeza, cada vez que no sale una hermandad. Llevo 20 años en el mundo cofrade y conozco el sufrimiento y el trabajo”. En cualquier caso, se queda con “la satisfacción” de que “ayer vi salir la Soledad a la calle, hacía años que no la veía”.

La Semana Santa sanroqueña tiene su punto álgido el Viernes Santo en la Procesión Magna del Santo Entierro, durante la cual procesionan por las calles del Casco las distintas hermandades y cofradías de la Semana de Pasión, portando algunas de ellas imágenes de gran antigüedad, que ya se veneraban en Gibraltar antes de la caída del Peñón y del traslado de sus habitantes a lo que ahora es San Roque.

Declarada como de Interés Turístico Nacional de Andalucía, la Procesión Magna es una de las más destacables muestras de fervor de la provincia de Cádiz, que sirve de punto de encuentro para muchos sanroqueños que viven fuera de la Ciudad. También es un foco de atracción de turistas españoles y extranjeros, que disfrutan de un gran espectáculo y de la intensidad y solemnidad con las que se vive este día en San Roque.