de San Roque
Autoridades municipales han visitado este miércoles la Laguna de Torreguadiaro para inspeccionar las últimas reparaciones realizadas desde el Ayuntamiento de San Roque en la pasarela de madera de este paraje natural, que se quemó en su practica totalidad en 2020 durante un incendio. Además de algunos tramos pendientes desde entonces, se han renovado otros que se habían sido objeto de actos vandálicos.
La teniente de alcalde delegada de Obras y Servicios, Belén Jiménez, y la concejal responsable del Valle del Guadiaro, Eva Gil, han inspeccionado los últimos trabajos realizados en la pasarela de madera de la Laguna de Torreguadiaro. Tras el incendio de 2020, que afectó a la práctica totalidad de la instalación, se han realizado distintas reparaciones por tramos, si bien la última ha servido también para renovar los elementos destruidos por recientes actos vandálicos.
Belén Jiménez explicó que Obras y Servicios ha venido realizando en los últimos años la reparación de la pasarela por tramos, priorizando los que tienen mayor uso diario por visitantes y vecinos. La inversión acumulada desde entonces se sitúa en unos 150.000 euros.
A principios de agosto de 2020 muchos bañistas de la playa de Torreguadiaro y vecinos de la zona asistieron alarmados al incendio, que afortunadamente no causó víctimas aunque sí destruyó la pasarela de madera, de unos 300 metros de extensión, que rodeaba la laguna, lo que supuso la pérdida de un lugar de paseo para numerosos habitantes del Valle del Guadiaro.
La pasarela fue construida el año 2003 por la Demarcación de Costas del Ministerio de Medio Ambiente, pero posteriormente la competencia en este tipo de espacios naturales se transfirió a la Administración Autonómica.
La Laguna de Torreguadiaro es un pequeño reducto natural de 2 hectáreas, entre el Puerto Sotogrande y el núcleo de Torreguadiaro. La laguna costera era un brazo de la desembocadura del río Guadiaro que quedó separado por cambios naturales y artificiales en el transcurso del siglo XX. Hasta que el fuego arrasó con estos elementos, contaba con una ruta de pasarelas, paneles informativos y un observatorio de aves. Es un enclave protegido por el Plan Especial de Protección del Medio Físico de la Provincia de Cádiz.