Mateo Isola y Germán de Andrés, de jóvenes promesas a toda una realidad del rugby andaluz

Ambos estuvieron ayer martes en el programa Canal Deportivo (CSRTVM), donde narraron su experiencia vivida durante la primera convocatoria del combinado autonómico, celebrado el pasado fin de semana en La Cartuja de Sevilla.

Germán y Mateo son puro corazón, pasión, fuerza y entusiasmo. Cuando el equipo salta al terreno de juego con el alma al aire y sin miedo, ya sabemos lo que puede pasar. La memoria de los dos jugadores de rugby está fresca aún con los nervios de la primera vez ante un micrófono de la radio. Agradecen mucho su primera convocatoria con la selección autonómica, donde han adquirido conocimientos tácticos y técnicos, muchas experiencias que han tenido la oportunidad de compartir con muy buenos chicos y jugadores de otros clubes andaluces que han ayudado a mejorar el juego. Germán lo tiene muy claro: “Me quiero proyectar en la selección, dar lo mejor siempre para poder representar a mi comunidad autónoma en todas sus competiciones, y desde mi Club, que me ha brindado esta oportunidad única de aprendizaje y crecimiento personal y deportivo”. Un tipo de los que se come el campo y anota con contundencia.

Pero es mucho más, porque sabe que con eso no basta. Le preguntamos por su juego. Por lo bueno y por lo menos bueno, en definitiva:“Soy un jugador muy ofensivo. Puedo jugar en las dos posiciones, construyo y destruyo el juego rival”, dice Germán: No tengo problemas para defender, al contrario me gusta mucho. Estoy trabajando muchísimo en el placaje y en el tiro lejano esta temporada lo he mejorado mucho. También mi físico y mi regate”.

Mientras, Mateo está ahora lesionado en la zona del cuádriceps femoral derecho, ya que es el músculo más voluminoso y que soporta mucha tensión. Está en plena fase de recuperación y masaje con el fisio, que le ha dicho que tiene para al menos un mes de tratamiento y reposo. Tiene ahora el reto de seguir brillando con su equipo, Rugby del Estrecho, pero también en la selección autonómica antes de plantearse el salto a Inglaterra el próximo curso, donde seguirá cursando sus estudios de formación académica. Un gran desafío para el que se siente preparado.

Pero haga lo que haga, sea en España o en cualquier liga, parece claro que lo seguirá haciendo con el alma fuera y con la garra del chaval que anota con la fuerza de un tren. Puro fuego en la cancha de juego, de un deporte, el rugby, que se ha asentado en el municipio de San Roque, a base de mucho trabajo, esfuerzo y sacrificio.