Las Escuelas de Familia, o saber afrontar el día a día con los niños

Aunque hoy se ha cerrado el plazo de admisión de solicitudes para el programa, desde la Delegación de Bienestar Social se advierte de que aún pueden recibirse solicitudes de última hora, a fin de conformar grupos de al menos 10 padres por edades de los niños y barriadas.La concejal delegada de Bienestar Social, Ana María Rojas, y la técnico municipal del programa, Silvia Camacho, junto a la representante de Cepsa, Amalia Puigdengolas, han presentado hoy esta iniciativa, que se desarrollará en todos los núcleos de población sanroqueños.Los detalles de esta nueva edición, la décimo segunda, han sido hechos públicos hoy en el programa “Una Mañana Distinta”, de Canal San Roque Televisión, conducido por Salva Serrano, y en que ha estado presente también una madre participante en las cuatro últimas ediciones de la Escuela de Familia.Aunque se han distribuido miles de folletos entre los alumnos, los interesados que no hayan accedido a esta información pueden apuntarse aún en el Edificio de Servicios Sociales (c/ La Ermita, junto a la Piscina Municipal), en los centros escolares o en las alcaldías de barrio.La Escuela de Familia pretende ser un lugar de formación para los tutores de los niños. El planteamiento es el de ampliar conocimientos sobre asuntos como castigos, normas y estudios; ofrecer recursos y habilidades para mejorar la relación con los menores; y reflexionar sobre las situaciones cotidianas que nos preocupan.Recordó la edil de Bienestar Social que esta actividad viene funcionando desde 2001 y se enmarca en el programa de Ciudades contra las Drogas, con lo que la Escuelas de Familia logran un doble objetivo, educar y prevenir.Por ello, Rojas animó “a todos los padres, madres, abuelos, educadores, etc, en fin, a todos los encargados de la educación de los niños a que acudan a estos talleres. No quitan mucho tiempo, porque se realizan con un máximo de dos horas semanales, se desarrollan en cada barriada (edificios multiusos municipales y centros educativos) y en sólo diez sesiones los padres aprenden muchas cosas útiles”.Por su parte, Silvia Camacho recordó que se cuenta con la colaboración de la Coordinadora Abril, que trabaja en el municipio. Indicó que “estos talleres también deben entenderse como una labor de prevención frente al consumo de drogas. Muchas de las situaciones conflictivas que aquí se enseñan a solucionar, en la adolescencia pueden derivar si no se remedian en exclusión y consumo de estas sustancias”.“No se trata -dijo- de decir a los padres lo que hace bien o hacen mal, sino darles recursos para afrontar cuestiones del día a día con los niños, desde preescolar hasta la adolescencia”.Camacho señaló que estas Escuelas no están dirigidas a padres con niños con problemas, sino todo lo contrario, “ya que se trata de dar armas a los padres para afrontar los problemas que puedan surgir y saber cómo actuar”Las escuelas se dividen por edades entre padres con niños o adolescentes, y en las mismas se abordan asuntos como resolución de conflictos, comunicación con nuestros hijos, expresión corporal, y las expectativas hacia los hijos.Además, en cada Escuela de Familia se tratan cuestiones personales con los padres, para abordar situaciones concretas que preocupen a cada padre.