de San Roque
Las entradas llevaban agotadas desde hacía varios días para este segundo sábado de la III Bienal “Canela de San Roque” y, tal y como esperaba, el público ha encontrado en el escenario el duende flamenco. Poderío y fiesta fueron puestos por Remedios Amaya. La precedieron grandes artistas del cante y el baile como los cantaores Dolores Agujetas y Antonio Aparecida, así como el bailaor David Morales que cerró el acto con un gran espectáculo. La próxima cita será el viernes 23.
Antes de que comenzase el acto, la concejal de Cultura, Ana Ruiz, junto a la edil María Collado y Juan Serván estuvieron con los artistas de la noche en sus camerinos para agradecerles su participación en la Bienal y desearles que disfrutasen dando lo mejor de ellos.
El acto, presentado por Juan Casal, comenzó con la actuación de Antonio Macías Flores, cantaor gitano, más conocido en el mundo del cante con el nombre artístico de Antonio Aparecida, nació en San Roque en 1955, en el seno de una familia de tradición flamenca. El apodo le viene por su madre “La Aparecida”. Marchó a Madrid con la edad de 14 años buscando ser un buen cantaor flamenco. Allí vivió el flamenco día tras día en los tablaos y fiestas, de la mano de los más grandes artistas, como Pepe Culata, Pericón de Cádiz, Rafael Romero "El Gallina", Sordera de Jerez, Terremoto, etc.
Tras su vuelta a su pueblo, empezó a actuar en peñas y festivales flamencos, llegando a compartir cartel con figuras como Camarón de la Isla, Pansequito, Turronero, Gaspar de Utrera, Rancapino, etc. Domina tanto el cante sólo como el cante para baile. Ha grabado varios discos.
Aparecida ha tenido al toque a Manuel Peralta Flores, guitarrista y cantaor sanroqueño que ha acompañado a muchos otros cantaores y bailaores, compartiendo con ellos escenario en buena parte de la geografía, siendo uno de los embajadores del flamenco en San Roque, tanto a nivel nacional como internacional. También estuvieron en el escenario Chuste en la percusión; y Fernando Segovia y José Rubichi a las palmas
Seguidamente se disfrutó en el escenario de Dolores Agujetas, que tuvo el acompañamiento del guitarrista El Perla y a Fernando Segovia y José Rubichi a las palmas. Dolores de los Santos Bermúdez (La Agujeta) es una cantaora gitana nacida en Jerez de la Frontera en 1960, procedente de una familia de grandes nombres flamencos, como su padre Manuel y su abuelo, conocido como Agujetas Viejo. Debutó en 1991, y en el año 2000 publicó su primer disco.
Ha actuado en festivales de Francia, Alemania, Bélgica, Holanda, Austria, Japón... así como en toda España. En 2009 grabó junto a otras cantaoras jerezanas el disco “Mujerez”, que obtuvo el premio de la crítica “Flamenco Hoy”. Actualmente se la reconoce como una de las máximas representantes del cante flamenco jerezano, aunque alejada de toda comercialidad, ofreciendo en todas sus actuaciones un arte centenario sin contaminar.
Por su parte, el guitarrista “El Perla” es sevillano y autodidacta, y ya con 15 años tocó para “El Chocolate”. Aunque se llama Jesús, prefiere que lo denominen por su nombre artístico. A “El Perla” lo reclaman los cantaores por su compás, por su dominio del tiempo y conocimiento del flamenco. Se ha hecho un nombre tocando por soleá, y ha tocado con grandes como Diego y Juan del Gastor, habiendo acompañado a Bernarda y Fernanda de Utrera o a Lola Flores, así como a José Valencia, Rubio de Pruna y Juana la del Pipa.
Acto seguido salió al escenario la estrella principal del cartel de este tercer espectáculo de la Bienal “Canela de San Roque”, Remedios Amaya, quien con su quejío hizo aflorar sentimientos entre el público del teatro que no paró de palmear al ritmo de sus cantes. La cantaora agradeció al ayuntamiento de San Roque que hubiese pensado en ella para participar en esta Bienal. Además hubo un momento muy emotivo cuando desveló al público que sus padres se encontraban en la UCI debido a la Covid, comentario que hizo que se le saltaran las lágrimas y el teatro respondió con una ruidosa ovación de aplausos llenos de cariño y admiración. Remedios se descalzó al comienzo de su cante y así de llana y cercana se mantuvo en toda su intervención casi no utilizando el micrófono ya que se movió mucho por el escenario.
María Dolores Amaya Vega tiene como nombre artístico el de Remedios Amaya (Sevilla, 1962). Conocida como “la Camarona de Triana”, por su relación personal y estilística con el gran cantaor de San Fernando, comenzó a actuar con once años. En 1983 representó a España en el Festival de Eurovisión, siendo la primera mujer gitana en participar en este certamen.
Está reconocida como una de las grandes voces del flamenco actual, aunque también brilla en géneros cercanos como la rumba. Ha editado varios discos, y ha colaborado con artistas como Diego Carrasco. En agosto pasado actuó junto al bailaor Farruquito en Pamplona, dentro de los conciertos “Flamenco On Fire”.
En la noche no sólo hubo cante sino que también se disfrutó del baile a través de la figura del bailaor y coreógrafo linense David Morales que cerró este tercer día de la III Bienal “Canela de San Roque”. El bailaor expuso un gran espectáculo con juegos de luces, cambios de vestimenta y un hermoso, cuidado y profesional baile. Le acompañaron Gaspar Rodríguez a la guitarra, Esperanza Soria y Jesús Corbacho al cante, Guillermo Ruiz y Chuste en la percusión y Josemi Herrera al violín.
David Morales comenzó con sólo 6 años en los principales festivales de Andalucía, y ha girado por escenarios de todo el mundo en sus más de tres décadas de carrera. En 1998 estrenó su primera producción propia “Sensación”, y desde entonces ha creado obras como “Contrabandista”, “Íntimo”, “Abraçado”, “El Indiano” o “Bailes de ida y vuelta”. Su último espectáculo es “Amor en libertad”, sobre la pasión de Simón Bolívar y Manuela Sáenz, donde mezcla flamenco y músicas suramericanas.
La III Bienal “Canela de San Roque” está organizada de la Delegación Municipal de Cultura, que dirige la concejal Ana Ruiz, en total son cinco espectáculos de los que se llevan disfrutados tres. Todos se inician a las 21.00 horas, si bien se recomienda acudir al teatro con antelación para facilitar una entrada ordenada con la que evitar contagios de covid (las puertas se abrirán sobre las 20.00 horas). Además se ha reducido el aforo del teatro a sólo 300 personas, de manera que se garantiza la distancia social; habrá que asistir con mascarillas y que utilizar los dispensadores de gel hidroalcohólico; y también se evitarán las aglomeraciones con itinerarios separados al entrar y salir del recinto tanto para el patio de butacas como para el anfiteatro, dividiéndose las salidas por sectores de público.
La Bienal se retomará el viernes 23 de octubre con la actuación de Luis Ortega acompañado a la guitarra de Marcos Serrato. También se contará con la sanroqueña Paqui Lara y a la guitarra Manuel Peralta; Alonso Núñez “El Purili” y Miguel Salado al toque; y, por último, Juana del Pipa y la guitarra de Miguel Salado. Todas las actuaciones estarán presentadas por Carlos Vargas.
La jornada de clausura tendrá lugar el sábado 24 de octubre, con la actuación del bailaor Farruquito, quien pondrá el broche de oro a la tercera edición de la Bienal de Arte Flamenco “Canela de San Roque”.