de San Roque
Este fin de semana ha dado comienzo la Escuela de Magia, una actividad organizada por la delegación municipal de Cultura, que dirige la edil Ana Ruiz. Hoy han disfrutado de la magia los niños de la Estación de San Roque y ayer, sábado, fueron los de Taraguilla. La actividad se llevará a cabo en todo el municipio.
Por primera vez en San Roque se disfruta de una Escuela de Magia, es una actividad organizada por la delegación de Cultura a través de la empresa “La Chistera del Mago” de Aarón Varela junto a María Arango.
La actividad será llevada por todo el municipio y ha dado comienzo este fin de semana. El primer día fue ayer, sábado en Taraguilla con la asistencia de unos veinte niños y niñas. Y hoy, domingo, ha sido en La Estación de San Roque con el cupo lleno.
A los niños que asistan a la actividad se les entrega una bolsa con elementos para aprender trucos de magia para, después en sus casas, sorprender a sus mayores.
La concejal de Cultura Ana Ruiz, que destacó que la Magia tiene muchos valores para los pequeños, ha explicado que los talleres son gratuitos y se van a llevar a efecto en todas las barriadas durante el mes de octubre.
La próxima cita será en Miraflores el día 9; en Guadarranque el día 10; en Puente Mayorga el 16; en Campamento el 17; en San Enrique el 23; en Guadiaro el 24; y en San Roque casco los días 6 y 7 de noviembre, todos en horario de 11 a 13 horas.
Los talleres tienen un límite de 25 niños por cada uno y la edad mínima para participar es de 6 años. Varias de las citas ya están completas, las reservas deben realizarse al número de teléfono 615 357 345.
Ana Ruiz explicó que cada niño participante va a recibir una mochila de regalo y un kit de magia. “Los niños llevan la magia dentro, les fascina, y la ilusión en sus ojos se puede notar desde lejos”, señaló la edil, que detalló los beneficios de la magia en los niños.
La magia enseña valores, como el del esfuerzo, la constancia y la paciencia; estimula la motricidad, ya que se requiere de habilidad manual; promueve la comunicación, porque desarrollan mejor sus habilidades comunicativas; y potencia la creatividad, ayudándoles a resolver situaciones, acertijos o problemas matemáticos.
La magia también mejora la autoestima, ya que para los pequeños más vergonzosos, la magia puede convertirse en una bonita manera de perder el miedo y ganar seguridad.
La magia fomenta el espíritu crítico, porque cuando lleguen a adultos tendrán mayores dotes de capacidad de análisis y espíritu crítico, que les servirá para cuestionarse todo lo que ocurre a su alrededor.
La magia une a la familia, porque no hay nada mejor como una tarde en familia y que el pequeño aprendiz de mago ponga en práctica los trucos que ha aprendido y se le aplauda sin parar.