de San Roque
Los asesinatos de una mujer embarazada en Guadalajara y de otra en Castellón junto a su hijo de diez años han conmocionado a la sociedad española. Ya son 41 el número de mujeres víctimas de la violencia de género en lo que va de año, a las que se suman cinco menores. Los sanroqueños han rendido homenaje este mediodía a los tres fallecidos, y han vuelto a mostrar su rechazo frontal a la violencia machista.
A la concentración de hoy asistieron varios miembros de la Corporación así como trabajadores municipales y particulares. Se guardó un minuto de silencio tras el pancarta con el siguiente texto: “¡No más asesinatos de mujeres! San Roque contra todo tipo de violencia de género”. Hay que recordar que en el Pleno Ordinario celebrado el pasado 29 de noviembre de 2012 se aprobó por unanimidad una moción de toda la Corporación contra la violencia machista. En ella se decidía que tras cada muerte de este tipo registrada en España se organizara una concentración frente a la Casa Consistorial y se guardara un minuto de silencio de condena.
El alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, ha lamentado estos nuevos asesinatos y ha puesto el acento en que una de las víctimas era menor de edad. Para el regidor sanroqueño, hay que seguir avanzando en la lucha contra este fenómeno. En este sentido, adelanto que a los distintos programas y medidas que lleva a cabo el Ayuntamiento de San Roque contra la violencia de género, se va a sumar pronto un nuevo recurso que permitirá a la Policía Local mejorar la protección de las víctimas.
Se trata del Programa de Seguimiento de Víctimas de Violencia de Género (Viogen). Gracias al mismo, la Policía Local podrá poder acceder a datos claves con los que cuenta la Policía Nacional. Entre ellos, cuándo un maltratador saldrá de la cárcel para disfrutar de un permiso penitenciario, lo que permitirá poder establecer el protocolo de protección adecuado para su víctima.
Las dos últimas víctimas mortales son una mujer peruana de 32 años, embarazada de siete meses que fue asesinada en Cifuentes (Guadalajara); y otra española de 52, asesinada en Vila-Real (Castellón), así como su hijo de 10 años.
Los agresores, de 36 años en el crimen de Cifuentes y de 52 en el de la localidad castellonense, son de nacionalidad española. El primero se encuentra a disposición policial, mientras que el segundo se suicidó una vez cometidos los asesinatos de su mujer y de su hijo.