de San Roque
El alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, ha destacado que la modificación de tres ordenanzas fiscales en el Pleno Extraordinario del pasado jueves “va en la línea de no aumentar los impuestos a los ciudadanos, facilitarles el cumplimiento de sus obligaciones tributarias y no perjudicar a los sectores más castigados por la crisis”. Las ordenanzas modificadas son las relativas al impuesto de plusvalías, al mercado de abastos y a los mercadillos.
El primer edil explicó que “en lo concerniente a las ordenanzas de venta ambulante y mercadillos, se ha atendido a las peticiones de los comerciantes. Estaba establecido el abono anual de las tasas correspondientes, pero continuamente se nos demandaba fraccionar el pago. Al cambiar la liquidación de anual a trimestral se facilita a los comerciantes ambulantes el cumplimiento de esta obligación, de manera que les resulta menos gravosa”.
“También se ha modificado la redacción de la Ordenanza en algunos puntos -señaló el alcalde- para hacerla más acorde a la realidad del sector, al igual que se ha hecho con la del mercado de abastos. En cualquier caso, tanto los aspectos relativos a la gestión de los puestos como a las tarifas no han sufrido modificaciones ni al alza ni a la baja”.
“Pero -subrayó Ruiz Boix- es la modificación de la ordenanza de la 'plusvalía' (Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana) la que tiene un número potencial de beneficiarios más alto. Las modificaciones van en doble sentido. En primer lugar -dijo-, hay que recordar que la última ponencia de valores catastrales data de 2009, y que San Roque se acogió a la medida legal que permite reducir la base imponible en un 40% durante cinco años”.
“Como el plazo de esta bonificación finaliza el 1 de enero próximo -apuntó-, la citada base imponible subirá notablemente. Como los valores catastrales de 2009 son demasiado altos para la realidad del mercado inmobiliario actual, desde el Equipo de Gobierno y con el apoyo de toda la Corporación se aprobó el jueves reducir el tipo impositivo del 30% al 18%. De esta manera se compensa el incremento de los valores catastrales a la hora de liquidar este impuesto”.
“La segunda modificación de esta Ordenanza aprobada el jueves -añadió- se refiere a la dación en pago de la vivienda habitual. Lo que hemos hecho es adaptar la normativa municipal a los recientes cambios legales, de manera que los ciudadanos que hayan tenido que acogerse a esta medida al no poder afrontar el abono de la hipoteca, al menos tengan la tranquilidad de que no tienen que abonar este impuesto”.
“Se trata -consideró el alcalde- de una medida acorde al sentido común y solidaria, porque bastante triste es tener que uno deba entregar su casa al banco para que encima haya que pagar un impuesto al Ayuntamiento. Pero hasta ahora no estaba recogida esta situación en la Ordenanza, ya que se trata de una posibilidad relativamente novedosa (la dación en pago no se reguló en España hasta noviembre de 2012)”.
“Lo más importante -concluyó Ruiz Boix- es que toda la Corporación ha coincidido en respaldar una serie de medidas impulsadas desde el Equipo de Gobierno tendentes a adaptar las ordenanzas fiscales a la realidad actual y que buscan no aumentar los impuestos a los ciudadanos en una época de crisis económica”.