Trabajos de pintura y otras mejoras en los colegios del municipio de cara al inicio de curso

Martes, 29 Agosto 2023

La Delegación de Educación del Ayuntamiento de San Roque y la de Obras y Servicios están llevando a cabo distintos trabajos en los colegios del municipio para que estén listos de cara al inicio del curso escolar. Entre otras labores, se está procediendo al pintado de aulas y zonas comunes, a limpiezas a fondo y a la sustitución de extintores de incendios que hayan cumplido su vida útil.

Las tenientes de alcalde delegadas de Educación, Mónica Córdoba, y de Obras y Servicios, Belén Jiménez, han visitado hoy, martes, el CEIP Carteia, en San Roque Ciudad, para inspeccionar los trabajos que se realizan en dicho centro. Explicó Mónica Córdoba que, dentro de las mejoras que se están realizando en los distintos colegios aprovechando las vacaciones de verano “se está pintando donde hacía falta”.

“Se ha hecho la revisión -añadió- y la sustitución de los extintores que por ley hay que cambiar al cumplir los 20 años. Y también una limpieza a fondo con el grupo de trabajo que hemos contratado desde el Ayuntamiento con la empresa Valoriza”. La edil espera que el resultado “sea del gusto” de toda la comunidad educativa, ya que este viernes comienza el curso en las guarderías y el día 11 en Infantil y Primaria, si bien los docentes empiezan a trabajar en los colegios el día 1.

Belén Jiménez, mientras, indicó que Obras y Servicios apoya a Educación de cara al inminente inicio del curso escolar, en concreto, en lo referente a pintura. “Hoy -dijo- estamos visitando el CEIP Carteia pero se ha actuado en todos y cada uno de los colegios del municipio de Infantil y Primaria”, ya que es en estos centros donde tiene competencias el Ayuntamiento.

“Además -añadió la edil- estamos haciendo la revisión de todos los extintores de todos los centros educativos”, tanto los estándares de polvo como los de CO2 que se utilizan para incendios en instalaciones eléctricas y electrónicas. En este sentido, se han sustituido los que han agotado su vida útil de 20 años, como estipula la legislación, “ya que se trata que los niños vengan a los centros educativos con la seguridad que corresponde”, concluyó.